Ciudad de México.- El agresor de Andrea Noel fue identificado gracias a usuarios de redes sociales y ayer se presentó junto con cuatro abogados ante el Ministerio Público que lleva el caso para conocer el expediente, señaló la periodista.

En entrevista con SinEmbargo, confirmó que existe un imputado “que no le he señalado por nombre, basta decir que es una persona pública, no digo el nombre porque no quiero complicar el proceso ni que él diga que lo he difamado”.

La periodista, quien decidió salir de México tras la agresión de la que fue objeto luego de que un sujeto en la colonia Condesa le levantará la falda por la espalda y le bajara la ropa interior, para posteriormente dejarla tirada en el piso –todo captado por cámaras de edificios aledaños- afirmó que se trata de un joven de “familia”.

“Lo identificaron gracias a las redes sociales, que me lo enseñaron a mí y con base a eso pude empatar la persona con otra que vi físicamente, entonces no quiero decir mucho. Le quiero dar la oportunidad de pedir una disculpa de ponerlo en la esfera pública que le sirva un poco para entender que lo que hizo estuvo mal”, afirmó la periodista.

El pasado 8 de marzo, un sujeto le levantó el vestido y le bajó la ropa interior mientras caminaba por la colonia capitalina y a plena luz del día.

La joven compartió el video del momento de la agresión a través de cuenta de Twitter, acompañado del siguiente mensaje: “Otra vez como pasa diario con mujeres en todo México, me acosaron en una calle linda y bien iluminada a plena luz del día”, denunció la periodista en sus redes sociales”.

Además acompañó su denuncia de una grabación del momento de su agresión y pidió a los usuarios que si reconocían al sujeto lo identificaran.

Noel informó posteriormente que las autoridades de la Ciudad de México se negaron a entregar los videos e iniciar la búsqueda de su agresor.

Ante la serie de agresiones e insultos que empezó a recibir en redes sociales así como intimidaciones.

En su momento, Noel dio a conocer que las autoridades de la Ciudad de México se negaron a entregar los videos de las cámaras de seguridad pública del momento en que ocurrieron los hechos para iniciar la búsqueda de su agresor, pues para hacerlo, debía someterse a una prueba psicológica.

En tanto, como lo señaló en entrevista previa con SinEmbargo, los ataques en su contra persistían: una noche, mientras se encontraba en su casa, utilizando la computadora, sintió la luz de un láser en su frente, se asomó por la ventana y vio un vehículo BMW blanco estacionado afuera con varias personas en su interior, una de ellas apuntándole a la cabeza.

Tras solicitar el auxilio de la Policía, nadie atendió su reporte. En otra ocasión, alguien le envió una amenaza de muerte por Twitter, acompañada por una fotografía de su ubicación.

CONTENTA DE NO ESTAR EN MÉXICO
Andrea afirmó que su agresor busca un careo, “pero yo no lo quiero; apenas ayer fue a ver la carpeta de investigación, yo creo que este fin de semana se va a decir qué va a suceder exactamente”

Afirmó que el reconocimiento, por parte del imputado, le daría “mucho gusto porque se trata de que todo ha sido una pelea para modificar el comportamiento de la gente, yo creo que él mismo no entiende que lo que hizo no está bien, lo ve como algo chistosito de para qué lo haces de pedo, lo que importa que es que no sólo él entienda que lo que hizo estuvo malo sino que también la sociedad repugne estas conductas”.

“Que reconozca como hombre lo que hizo, me daría mucha felicidad que diga: ‘Acepto lo que hice y admito que está mal’, ese cambio de pensamiento me daría gusto porque significaría que aunque fuera este individuo, dejaría el mensaje de que esto no se hace, no se golpea, no se abusa de la gente”, expresó.
El jueves, Andrea lanzó la capaña #NoTeCalles, en la que en un video, junto con Gabriela Nava, estudiante de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán y la activista Yakiri Rubio, buscan generar una cultura de denuncia en contra de sus agresores.

Señaló que parte de esta campaña es invitar a otras mujeres que han sido víctimas de abusos sexuales, a denunciar a sus agresores, a las autoridades y a los medios de comunicación de las revictimizan.

Señaló que en los tres casos, existen sujetos señalados ante el Ministerio Público, por nombre y apellido, algunos hasta por domicilio y lugar de trabajo, pero siempre existen un cero de protección en torno a ellos.

Citó, el caso de Yakiri, quien tras ser abusada sexualmente fue encarcelada por denunciar a su agresor, en el caso de Gabriela, tiene fotografías de la persona que la agredió, pero la universidad en la que trabaja lo protegió.