En el último año, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) rompió récord en el número de Registros Federales de Contribuyentes (RFC) suspendidos.

En total, según datos de la dependencia, ha suspendido 726 mil 96 Registros de personas físicas que no cumplieron con sus declaraciones y otras obligaciones o dejaron de tener actividad.

Esta cifra, contabilizada desde el cierre de febrero de 2015 a febrero de 2016 es mayor a todas las realizadas entre 2012 y 2015.

De acuerdo con el SAT, la suspensión del RFC se realiza cuando el contribuyente deja de presentar declaraciones periódicas a las que está obligado o cuando la información proporcionada por otras autoridades o contribuyentes confirman que no ha realizado actividades económicas durante dos ejercicios fiscales consecutivos o más.

En total, según las cifras del fisco, hay 6 millones 466 mil contribuyentes con su RFC suspendido, mismos que se contabilizan en los registros del padrón de contribuyentes.

Con esto, los contribuyentes no pueden seguir con sus actividades formales de manera regular; por ejemplo, no pueden seguir facturando y cualquier documento que liberen no tendrá validez para la autoridad.

Tampoco pueden obtener sellos digitales o validar nóminas, que son otros requisitos que solicita la autoridad, dependiendo de las actividades del contribuyente.

Según el fisco, las suspensiones de RFC le permiten mantener un registro actualizado del padrón de contribuyentes, diferenciando a aquellos que sí están activos respecto de los que no.

Además de las suspensiones, al cierre de febrero de 2015, el SAT registraba 732 mil 734 RFC cancelados, sobre todo por falta de actividades y de los cuales 100 mil corresponden a operaciones realizadas en el último año.