¿A dónde vamos?

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¿A dónde vamos?

El Coahuila idílico sólo existe en la imaginación del Gobernador. El Torreón bucólico y seguro sólo existe en los sueños del alcalde favorito del Gobernador, Miguel Ángel Riquelme. 

Saltillo, como la mejor ciudad para vivir del planeta, sólo está en la mente alambicada de “Chilote” López Villarreal. Si el mundo real desmiente el mundo ficticio de quien manda en Torreón y Saltillo, usted imagine lo que pasa en Múzquiz, Abasolo u Ocampo. El limbo, la nada. Por eso Coahuila está como está. 

He hecho referencia en este espacio una y otra vez sobre la impunidad y la problemática de salud que rodea a todo ser humano en Coahuila. Hay casos que arañan el alma, los cuales se presentan con tanta frialdad que apuntalan lo aquí expresado y desmienten el tono triunfalista de quien nos gobierna. En teoría todo está de maravilla. En la vida real nada funciona. 

Y ya inmersos en este primer trimestre del año y con un presupuesto magro en todos los sentidos de inversión, este ya afecta las arcas estatales y municipales. No se prevé mejoría alguna debido a que los bajos precios del barril de petróleo están en picada. Situación que afecta al País todo por tener puesta en esta canasta el 90% de los huevos de la economía nacional. Al momento de redactar estas líneas, el barril anda por los 30 dólares el barril. Nada, comparado con los 137 dólares diarios que obtuvo en dos años consecutivos en el periodo de Felipe Calderón. Cuidado. 

Sin presupuesto no hay gasto. Sin gasto ni hay inversión en políticas de salud, educación, prevención del delito y un largo etcétera. Un problema del cual le platiqué brevemente en columna pretérita: la falta de educación sexual en los adolescentes. 

Los embarazos de niñas y jovencitas y por extensión, ante tal visión tan chata y parquedad de futuro y metas, estos jóvenes reflejan un hecho inocultable: el paraíso de Coahuila no existe, no ven futuro, no comen saludablemente, no encuentran empleos bien remunerados, calles seguras, nada. Queda solo lo inmediato: los placeres de la carne. No la educación, sino el sexo. No el futuro que es desiderata, sino aquí y el ahora que es una tarde, una noche de desenfreno, copas, sexo y… Embarazos. 

Niñas cuidando niños. Según estimaciones del Consejo Nacional de población (Conapo), en el 2015 recién terminado, dos de cada 10 embarazos en Coahuila se dan entre adolescentes de 15 a 19 años. 

Coahuila terminó en los primeros lugares a nivel nacional en embarazos precoz. 

Y si esto sigue así, estas madres de familia e hijos, cuando crezcan, necesitarán comida y satisfactores que aquí no hay por lo cual buscarán irse a… USA.

Esquina-bajan

Y por esto y no otra cosa, a las autoridades de Estados Unidos le preocupa tanto, que haya una “Estrategia de Prevención de Embarazos de Coahuila y Nuevo León; perspectiva binacional” con lo cual tratan de frenar esto por aquello de que seguir invadiendo su país en busca no del “sueño americano”, sino de algo más trivial: “comida”. Sólo en la Secretaría de Salud y en los primeros tres meses de 2015 se reportaron mil 660 embarazos en menores de 19 años, señaló Martha Alicia Romero, subdirectora de Prevención y Promoción de la Salud. La mayor incidencia fue de niñas de 15 a 16 años. Así de grave. De enero a septiembre de 2015, 8 mil 348 embarazos de niñas.  

Todo cuadra con todo. Usted lo sabe mejor que yo, hace poco fueron aprobadas reformas enviadas por el gobernador Rubén Moreira a una más de sus oficinas, en este caso, la Legislativa, el Congreso. En un tris se aprobaron lineamientos para prohibir el matrimonio en menores de edad. Lo anterior, dijeron los claques diputados locales, para “evitar” o “inhibir” los embarazos en las adolescentes. Ja. El problema es uno: casi el 100% por las jovencitas embarazadas ni están casadas ni les pasa por su cabeza. Así de claro. Se siguen embarazando al día de hoy con leyes o sin leyes de mi amigo José María Fraustro Siller. Ni las leen ni las conocen. 

Leyes para la basura. Dinero tirado. En la vida real, en Coahuila nada funciona. 

Lo pruebo: digamos que una niña de 16 años va a tener a su bebé y bueno, le exigen al adolescente varón que le “cumpla” a la embarazada, casándose con ella para que se haga responsable de los gastos de parto y manutención. Pues sí, el varón y su familia aceptan. Pero… ¡No se pueden casar porque en Coahuila está prohibido casarse en minoría de edad! 

¿Ya lo vio? Está de la chingada. Leyes que afectan la vida pública. Y nadie dice nada. Diputados como Javier Díaz o Verónica Martínez ayudan más si no levantan el dedo o se quedan dormidos. Puf. 

Letras minúsculas

Caray, ¿por qué nadie piensa? Volveré al tema recargado. Le tengo muchas perlas. ¿Ha notado que cada fin de semana los diputados andan en bodas en las playas de México? se llama “calidad de vida”.