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Participa obispo de Saltillo en actividades de reforestación
Saltillo.- Con la bendición por parte del obispo Raúl Vera López, la Fundación Impulso plantó en el Fraccionamiento Fundadores poco más de 500 árboles como parte de sus actividades en beneficio del medio ambiente y de la unificación familiar.
El área seleccionada para la reforestación fue un parque situado en Juan Navarro y Francisco de Urdiñola, en la mencionada colonia, y que a partir de ayer fue bautizado como el “Bosque Familiar”, pues cada uno de los árboles plantados tiene una familia como padrino, que lo estará cuidando y monitoreando durante su crecimiento.
Alejandro Martínez Álvarez, uno de los fundadores de Impulso AC, explicó que además de reforestar y embellecer el área seleccionada, otra finalidad de la actividades fomentar la unidad familiar.
“Cada árbol de los que se plantarán aquí, tiene ya un padrino y un responsable moral, que es una familia, que se encargará de regarlo, de darle atención y de reportarnos a nosotros como fundación que algo le ocurrió al arbolito, que tiene plaga, que requiere poda y nosotros como fundación vamos a responder”, dijo. Martínez Álvarez precisó que el sembrar un árbol genera un vínculo familiar entre los hijos, papás, abuelitos, hermanos, etcétera.
“Se encapsula de esa manera un recuerdo que cada día va a estar más vivo y el día de mañana, que ya no estén los padres, los abuelos, de alguna manera, cada que los hijos o nietos vean ese árbol, van a recordar ese momento y a la persona”, declaró.
Rememoró que ya les sucedió algo así en una actividad en Monclova, a mediados del año pasado, cuando la nieta y su abuelo sembraron un árbol en un espacio de la colonia Petrolera, de esa ciudad.
“Un adulto mayor con su nieta plantó un arbolito, regresamos en enero pasado a checar cómo iban los arbolitos y ya tenían los primeros brotes, y uno de los más verdes, preguntamos de quién era y resulta que el adulto mayor que lo plantón con su nieta había fallecido en diciembre.
“Y la nieta le decía a su mamá: ‘yo quiero que este arbolito no se muera como mi abuelito, por eso lo voy a cuidar mucho, lo voy a regar siempre’; entonces eso creó un vínculo, es como una fotografía que cada día que pasa es más viva”, expresó.
Los árboles plantados ayer fueron alamillos, fresnos, pirules y truenos, que son producidos en el vivero propio de la fundación, que tiene capacidad de producción entre 12 mil y 15 mil árboles al año.