Saltillo.- Al lamentar el despido masivo anunciado en la planta Ensamble de General Motors, el obispo Raúl Vera López exigió la implementación de políticas públicas que prevengan y eviten este tipo de hechos.

El jerarca de la Diócesis de Saltillo criticó la postura empresarial inhumana de contratar temporalmente a los trabajadores, a quienes despide sin miramientos una vez que cumplen con sus objetivos.

“En el caso de General Motors, ya acabaron con una línea y no les interesa la persona... el interés del empleador es ganar su dinero; la empresa tiene que pensar en sus trabajadores, pero no lo hace porque se lo han permitido”, señaló.

También criticó la postura de las autoridades gubernamentales al permitir que las empresas actúen de esta forma.

Dijo que el marco legal, como la Ley Federal de Trabajo no protege la seguridad de la familia ni la del trabajador “y con base en esa ley hacen lo que hacen”, asegura.

“En ese caso concreto tiene que haber prevención, si nada más van a dar unos empleos así todos mochos, todos inseguros, pues la prevención que debería de tener quien gobierna, no se ve”, expresó.

Como se sabe, General Motors anunció que alrededor de 200 empleados de serán despedidos ante el término de la producción del modelo Cadillac SRX en Ramos Arizpe. 

De acuerdo con el director general de General Motors en la localidad,  Héctor de Hoyos, los empleados tendrán que salir, debido a un reajuste de personal que afectará al 10 por ciento de los empleados de la Planta Ensamble.

“A costa de esos obreros a quienes se les contrata temporalmente se hace negocios y después se les echa a la calle, ‘ya hiciste todo lo que nos interesaba, ahora vete a la calle’”, externó.

CRITICA CASO CIMARI

Vera López también arremetió contra el engaño que a su juicio se le hizo a campesinos de General Cepeda, a quienes dijo, con engaños se les compraron sus tierras.

“Ahí está el caso también del Cimari, en General Cepeda. ¿Cómo entró esa empresa allá? Entró diciendo que les iba a poner unas granjas, que les iba a poner unas fábricas, así entró, así hizo que le vendieran la tierra, con engaños.

“Lo que a ellos les interesa, en este momento es su bien inmediato, es ganar dinero; no les interesa la vida de estos hermanos, no le interesa que estos hermanos, a la larga, vayan a estar respirando y bebiendo en el agua toda la porquería que les va a meter”, externó.

Reveló que platicó en privado con las gente del Cimari, a las que les advirtió que iba a causar un daño prolongado.

“Les dije: ‘vas a responder a Dios con esa barbaridad que estás haciendo’”, reveló Vera López.

“El que gobierna debe guardar la salud de esas personas. Quienes deben impedir todo eso, son quienes organizan las políticas públicas, quienes en las leyes deben de poner las maneras en que pueden venir a contratar”, apuntó.