México, DF. Es una superestrella mundial con un Oscar, una saga taquillera clausurada (Los juegos del hambre), otra a punto (X-Men), todo un futuro de proyectos interesantes como Passengers por delante e incluso un guión en desarrollo junto a Amy Schumer, la humorista más aclamada del momento. ¿Qué le queda por hacer a Jennifer Lawrence? Dirigir su propia película. Algo para lo que la actriz ya ha comenzado a dar los primeros pasos, según informa Entertainment Weekly.

“He querido dirigir desde que empecé a actuar. No hablo de ello porque prefiero simplemente hacerlo”, ha declarado la actriz a la publicación. “Acabo de firmar para dirigir una película titulada Project Delirium. Se basa en un artículo sobre la guerra química en los 60, sobre unos experimentos con ácido que salieron terriblemente mal. He querido dirigir desde que tenía 16 años y siempre pensé que debería empezar a encaminarme hacia ese campo. Si lo hubiera intentado antes no me habría sentido preparada, pero ahora desde luego que lo estoy”.

El artículo al que se refiere Lawrence es Operation Delirium, publicado por Raffi Khatchadourian en el New Yorker en 2012, donde se relatan los experimentos conducidos por el coronel James S. Ketchum en las instalaciones militares de Edgewood (Maryland, EE UU) entre 1960 y 1969. En ellos, en medio de un contexto de investigación de armas químicas durante la Guerra Fría, se suministró a más de 5.000 soldados voluntarios con peligrosos agentes incapacitantes como LSD, BZ (bencilato de 3-quinuclidinilo) y marihuana para explorar sus reacciones y buscar una droga capaz de neutralizar al enemigo sin matarlo. La mayoría de los participantes en los tests no recibieron el seguimiento correspondiente para diagnosticar posibles daños mentales causados por los experimentos, lo que abre toda una clase de posibilidades para el género en el que Lawrence busque encuadrar su ópera prima. Seguiremos expectantes.