Bastaron dos buenos latigazos de Santos, un equipo que piensa más en el siguiente torneo, para vencer 0-3 a Veracruz en un partido que rompió todas las quinielas y que le permite soñar a los de Torreón con defender su corona.

El equipo de Carlos Reinoso tuvo una noche para el olvido desde los primeros minutos, con falta de actitud y errores constantes a lo largo de los 90 minutos.

Andrade fue el único que llamó a la puerta del cuadro lagunero con un cobro de tiro libre que provocó una gran atajada de parte de Marchesín en la jugada más cercana que tuvieron los escualos para buscar el gol, ya que después todo fue albiverde.

Al minuto 38, Djaniny Tavares aprovechó la desconcentración de la defensa central para rematar en una ocasión, estrellar el balón en la humanidad de Melitón y todavía tener una segunda opción en la que no perdonó para abrir el marcador, sin que tampoco los laguneras hicieran mucho por estar al frente.

Antes de que terminara el primer tiempo, Rentería puso el segundo tanto del encuentro en una buena descolgada por el sector derecho tras un buen pase de Adrián Aldrete. El colombiano cruzó al portero para lucirse ante Juan Carlos Osorio, su ex DT en tierras cafeteras y ahora estratega del Tri.

El "Maestro" metió al campo a Daniel Villalva antes del silbatazo final del primer tiempo, pero de poco sirvió.

Veracruz nunca puso en predicamentos a Santos y Leobardo López ejemplificó perfectamente lo que el cuadro local fue esta noche: regaló el balón al querer devolverlo a su portero, Rentería tocó a Djaniny -quien estaba en fuera de juego- para que el africano pusiera cifras finales.