Tesla implementó varias capacidades de autoconducción a miles de sus coches Model S, ya en circulación, a través de una actualización de su software lanzado el miércoles. Entre otras prestaciones de Autopilot, el programa de autoguiado, hace que estos automóviles aparquen en paralelo de manera automática.

El fundador y director ejecutivo de la compañía, Elon Musk, afirmó en la presentación a los medios del nuevo software que "a largo plazo, la gente no necesitará poner las manos sobre el volante, y al final ya no habrá ni volantes ni pedales".

Autopilot conducirá el Model S dentro de un carril y podrá cambiarlo a otro. También regulará la velocidad por medio de un sistema que le alerta del tráfico. No todas sus funciones están en pleno funcionamiento, sin embargo.

    Estamos siendo especialmente cautelosos en esta primera fase y recomendamos a los conductores que mantengan las manos al volante, declaró Musk.

El coche también es capaz de rastrear si hay aparcamientos libres en la proximidad del vehículo. Cuando localiza uno, avisa al conductor y se ofrece a aparcar automáticamente. También previene de choques frontales y laterales.

Tesla ya había equipado los coches Model S con los radares, cámaras y sensores de ultrasonido necesarios para permitir la autoconducción que acaba de activar ahora.

Musk destacó que su compañía quería diferenciarse de la competencia creando una flota de coches que aprenden de sus experiencias mutuas en la carretera: "Cuando un vehículo aprende algo, todos los demás también".

Tesla ha desarrollado el nuevo software durante un año, con una premisa: "Intentamos que el coche se comportase como un buen conductor".