Londres, Inglaterra.- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, alertó hoy en Londres de que la intervención militar de Rusia en Siria "inflamará" la guerra civil en el país y fortalecerá a los grupos extremistas.

Las acciones "ilógicas" de Moscú, que según EU ha atacado a grupos opositores al régimen de Bachar Al Asad, "prolongarán el sufrimiento de los sirios", dijo Carter en una rueda de prensa conjunta con el ministro británico de Defensa, Michael Fallon.

Esos ataques "van a provocar además que todo el mundo se vuelva contra Rusia, se convertirán en un 'boomerang' para Rusia de un modo muy directo", afirmó el responsable estadounidense.

Durante su encuentro en la capital británica, Carson y Fallon abordaron la situación en Siria, las "amenazas" rusas en el este de Europa y la frontera de Turquía, así como los avances en el conflicto de Afganistán, detalló el ministro británico.

Fallon anunció además la intención del Reino Unido de invertir 70 millones de libras (94,5 millones de euros) durante los próximos cinco años en proyectos de innovación en tecnología militar.

"Si queremos que Occidente mantenga su liderazgo tecnológico, debemos hacer más", señaló el ministro británico, que apostó por reclutar "a los mejores cerebros en el Gobierno, la academia y la empresa".

Fallon y Carter subrayaron que ambos países deben inspirarse en la colaboración científica que mantuvieron durante la Segunda Guerra Mundial, de la que surgieron tecnologías como el radar, el propulsor a reacción y la bomba atómica.

"Estados Unidos no tiene un aliado y amigo más próximo que el Reino Unido. Los intercambios de información entre nosotros sobre estrategias de defensa reforzarán nuestra cercana relación y nos ayudarán a enfrentarnos a las amenazas comunes", dijo Carter.

El secretario de Defensa estadounidense afirmó que con la inversión anunciada por Fallon "el liderazgo mundial del Reino Unido cobra una nueva relevancia".

Carter sostuvo que invertir un mínimo del 2 % del Producto Interior Bruto (PIB) en defensa, como acordaron los miembros de la OTAN el año pasado en Glasgow (Reino Unido), "comporta tomar decisiones difíciles, pero envía un importante mensaje al mundo, que el Reino Unido está determinado a continuar con su importante contribución a la defensa colectiva de la Alianza Atlántica".

El ministro británico recalcó asimismo que su Gobierno continúa "construyendo apoyos parlamentarios" para aprobar un plan con el fin de sumarse a los ataques internacionales contra posiciones del Estado Islámico (EI) en Siria.