La decisión de alistar a Azar, de 50 años, quien se desempeñó como presidente de Lilly USA, la afiliada más grande de Eli Lilly &Co, antes de dimitir en enero para trabajar como asesor de atención médica, representa una elección pragmática.

Una figura del establishment con una reputación como un pensador conservador y un abogado metódico, se esperaría que Azar usara su experiencia como asesor general y subsecretario del departamento de Salud, para perseguir los objetivos de Trump a través de una acción ejecutiva.

Al nominarlo este Lunes por la mañana, Trump tuiteó: “Azar será una estrella para una mejor atención médica y menores precios de los medicamentos”.

Azar ha sido muy crítico con la Ley de Cuidado de Salud Asequible, diciéndole a Fox Business en mayo que la ley era sin dudas rodear el drenaje y declarando en un discurso hace dos meses que muchos de sus problemas eran completamente predecibles como una cuestión económica e individual.

“Es absurdo para mí que uno de los sectores más grandes de la economía se ejecute de una manera en que los consumidores no tienen una manera de averiguar sobre el precio o la calidad”, declaró Azar en un evento en Providence, Rhode Island, en 2007. No continuaremos siendo la potencia dominante en el mundo si continuamos gastando mucho más en atención médica que otras economías”.

En las últimas semanas, A zar ha sido considerado como la única opción probable para ser el próximo secretario del Departamento de Salud, la agencia civil más grande del gobierno, que abarca los Institutos Nacionales de Salud, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la Administración de Alimentos y Medicamentos y los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid, entre otras ramas.

Anticipando su elección, los senadores demócratas comenzaron a prepararse para sus audiencias de confirmación y pretenden enfocarse en sus vínculos con la industria farmacéutica, su posición sobre los altos precios de los medicamentos y la forma en que continuaría.

La selección de Azar se produce incluso cuando Trump ha atacado repetidamente a las compañías farmacéuticas de EU. Por beneficiarse demasiado, lo que sugiere que el gobierno federal debería negociar con ellos para obtener precios más bajos.

Reclutado para un puesto de cabildeo y comunicaciones en Eli Lilly en un momento en que enfrentaba múltiples demandas y publicidad negativa, Azar abogó por un enfoque de venta suave en el que los funcionarios de la compañía encontraron los tipos de productos farmacéuticos que los médicos querían, incluso si provenían de otra empresa.

Con información de The Washington Post