Como muchos recordaran, por aquellos días del 19 de septiembre del 2017, todas las cadenas de televisión se centraron en la cobertura de lo que ocurría en la CDMX minuto a minuto durante las labores de rescate.

Televisa, por su parte, envió a Danielle Dithurbide para informar a la audiencia sobre el progreso en el trabajo de los rescatistas en la escuela Enrique Rébsamen, la cual se derrumbó tras el temblor, dejando sepultados a decenas de niños.

Fue ahí donde comenzó la historia que muchos conocemos y por la que la periodista perdió la credibilidad y seriedad que había ganado por sus años de trayectoria.

De entre los escombros, se hablaba que había una pequeña sobreviviente que yacía debajo de los pesados pedazos de concreto, Frida Sofía era el nombre de la supuesta niña.

Fue así como Frida Sofía se convirtió en hashtag, en trending tópic y en el símbolo de una gran tragedia

Periodistas y medios de comunicación, entre ellos Dithurbide, presumieron haber tenido acceso a información que les permitió primero saber que había una niña viva, después, que se llamaba Frida y tenía ocho años, y luego que su edad era de entre 12 y 13 años.

Entonces empezó la búsqueda de los padres, por lo que se llegó a la conclusión de que tal vez la niña tenía otro nombre.

Después vino la versión de que había dicho a los rescatistas que había más niños junto con ella.

"Tenemos identificada a una persona, a una menor, en el segundo piso de lo que fue el edificio colapsado. Está con vida, pero la situación era muy inestable", dijo José Luis Vergara, almirante de la Secretaria de Marina.

A partir de ahí empezaron a correr distintas versiones: una fue que los rescatistas habían hecho contacto con ella y que le habían pasado agua a través de una manguera.

El miércoles por la noche se informó que la niña estaba sepultada un piso más abajo de lo que se pensaba y que el rescate se demoraría.

Por la noche se hizo un exhorto a todos los padres, que aún no localizaban a sus hijos, a reportarse a un teléfono para encontrar a familiares de la niña que para entonces ya se sabía que se llamaba Frida Sofía.

El jueves por la mañana, ante la ausencia de los padres, empezaron a surgir versiones de que Frida Sofía no existía.

Después de mediodía, de manera improvisada, el subsecretario de Marina, Enrique Sarmiento Beltrán, llegó hasta la zona donde estaban ubicados los medios de comunicación que esperaban por el rescate en el interior de las ruinas del Colegio, que independientemente de Frida se convirtió en el emblema de la tragedia.

Aseguró que por "única vez" iba a dirigir un mensaje a los medios y que no iba aceptar preguntas.

"Queremos puntualizar que con la versión que se sacó, del nombre de una niña, no tenemos conocimiento. Nunca tuvimos conocimiento, nunca tuvimos conocimiento de esa versión, y creemos, no creemos, estamos seguros, de que no fue una realidad", dijo, y luego explicó que tras cotejar información con la secretaría de Educación Pública, con la delegación (municipio) y la escuela, todos los niños estaban en sus casas, en el hospital o entre los 19 pequeños fallecidos.

Fue ahí donde todos voltearon los ojos hacía la conductora de “Despierta”, señalándola como la responsable de armar “el teatro” alrededor de la presunta niña que se mantenía con vida debajo de los escombros.

Y es que Televisa dio una amplia cobertura al caso de la supuesta niña. La televisora transmitió ininterrumpidamente los trabajos de rescate, incluso, dijo que la Secretaría de Marina les comentaba que la menor les pedía agua.

De inmediato, Danielle salió a dar su declaración tratando de aclarar las acusaciones, sin embargo aquel tiempo y hasta la fecha, la población la culpo a ella y a Televisa crear una “novela” en medio de la tragedia.

Incluso, decenas de usuarios en Twitter recordaron aquel desatinado episodio tras la salida de Carlos Loret de Televisa y con la entrada de Danielle al noticiero para sustituirlo.

Con información de Infobae