Piedras Negras, Coah. – Alumnos, amigos, compañeros de trabajo, despidieron durante una misa al profesor de Educación física, José Gavia Alarcón, quien el pasado domingo, durante la carrera “Actívate Coahuila”, falleció de un infarto fulminante que le trunco su sueño de ganar la justa deportiva.

Hombre querido por todos sus alumnos porque cada día se entregaba para que cumplieran las diferentes disciplinas deportivas, y exigente con sus alumnos para que se ejercitaran. 

“José era un profesionista entregado a sus obligaciones. Espero que Dios lo reciba como se merece, porque era un buen padre, amigo, hijo, hermano y responsable como ser humano”, recuerda al término de la misa la señora Elia Nieves Solano Carrillo, suegra de “Pepe”, como también le llamaban de cariño.

Relató que uno de sus nietos que también participaba en la justa deportiva, lo vio cuando cayó, y alcanzo a ver que los ojos se le pusieron en blanco, sin embargo, a pesar de que llego la ayuda, el infarto fulminante no le dio la oportunidad de vivir.

 “Lo vamos a recordar como él era, tan feliz, tan contento, tan alegre”, dice Elia con lágrimas en su rostro al despedirlo en la iglesia San Martin, ubicada en la colonia Harold Pape, antes de ser cremado.
 
Le sobreviven sus hijos Ángel Fernando Gavia Sánchez de 12 años de edad y Ricardo Emanuel Gavia Sánchez de 9 años de edad y su esposa Miriam Elizabeth Sánchez de Gavia.